Muchas veces, ocurre que al terminar de consumir lo que traen en su interior, no sabemos qué hacer con los frascos de vidrio. En contraposición, en ocasiones compramos galletas o golosinas, y tampoco sabemos donde almacenarlas, ya que no contamos con un espacio apropiado. Por ello, hoy solucionaremos ambos problemas, decorando frascos de vidrio, para destinarlos a múltiples usos.
En primer lugar, deberemos enjuagar el frasco a la perfección, utilizando agua y detergente. Si el frasco posee etiquetas adheridas con mucho pegamento, entonces vamos a tener que sumergirlo en una olla con agua y llevar a hervor hasta que la misma afloje.
Una vez que el frasco de vidrio secó, entonces pasaremos un algodón embebido en alcohol por la superficie, para asegurarnos que no quedan rastros de suciedad. Y terminado este paso… ¡la superficie está lista para ser trabajada!
La decoración puede ser de miles de maneras diferentes, pero hoy veremos exclusivamente, la opción de pintar el frasco. Si gusta hacer una pintura determinada, es decir, si conocen algún motivo para el dibujo, simplemente deberán transferir el diseño a un cartón, calarlo y, de esta manera, utilizarlo luego como molde.
El trabajo se debe desarrollar con pinturas para vidrio y consiste en apoyar el molde sobre la superficie, ajustar con cinta de enmascarar, y dar pequeñas pinceladas rellenando el espacio ofrecido por el frasco. La combinación cromática es libre y personal.
Estos recipientes pueden ser utilizados para almacenar galletas, caramelos, frutas secas y todo aquello que se les ocurra. Incluso, es un lindo y económico regalo.
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Fuente – Taringa