Por eso, hoy os proponemos haceros un clutch de la forma más fácil que podáis imaginar. Ideal para cualquier situación, desde una cena hasta un paseo por la playa al atardecer.
Índice
Material
- Un mantel individual.
- Una pistola termoselladora y pegamento termosellador.
- Un adorno para poner en la solapa.
Proceso
Empezaremos por escoger el tejido que queremos para nuestro clutch. Hoy en día hacen manteles individuales de infinidad de materiales, formas y colores, por lo que, si preferiis que el clutch sea de otra forma, color o textura, no os resultará difícil encontrarlo.
Nosotros hemos escogido un mantel individual de forma rectangular, de color verde hecho con plástico rugoso y rombos. Un color ideal para éste verano.
Doblaremos el mantel individual en tres partes iguales. Las marcaremos con un lápiz o simplemente mantendremos uno de los dobleces para engancharlo con la pistola termoselladora.
Para hacer éste clutch, hemos pegado ambos extremos por la parte interior y en unos segundos ha quedado fijado.
Finalmente, hemos fijado un adorno (en éste caso una sandía) como complemento para darle un toque más original a un clutch básico.
Como siempre, esperamos que os haya gustado, y si es así, compartid, dadle al like y leednos en los siguientes DIY
¡Hasta el próximo DIY!
Sé el primero en comentar