Hace un año o un par de años, no recuerdo muy bien, se pusieron muy de moda los washi-tape. Pero, como pasa con todo, se pasaron de moda y seguro que a muchos y muchas os ha pasado como a mí y los habéis dejado enterrados en algún cajón o caja a la espera de que vuelvan a ser la última moda en manualidades.
En éste post, he querido recuperar los viejos washi-tape para hacer una manualidad muy simple y decorar vasos para transformarlos en portavelas. Un tutorial fácil y fantástico para hacer con el resto de la familia, pasaréis un buen rato y podréis crear infinidad de dibujos geométricos que decorarán cualquier rincón de la casa. ¿Y si os cansáis de ellos? fácil, sólo tenéis que retirar el washi-tape y volver a empezar.
Material
- Washi-tape de colores y dibujos diversos.
- Unos vasos.
- Unas velas.
Proceso
La idea que os muestro a continuación para hacer un portavelas es de lo más simple pero a la vez dará un aire cálido a por ejemplo, algún rincón de nuestra habitación que nos haya quedado desprovisto de vida y visibilidad.
Cogeremos un vaso con una forma original, en éste caso, he conseguido un vaso que es más estrecho de la parte de abajo que de la de arriba y con el contorno liso ya que, lo que pretendía era hacer líneas con el washi-tape. Una vez escogido el vaso, lo limpiaremos bien con agua y jabón y después lo secaremos para que no se nos humedezca el washi-tape.
A continuación, lo único que debemos hacer es cortar tiras de colores e ir colocándolas sobre el cristal con cuidado para que nos quede lo más liso posible. Una vez que hayamos acabado con el dibujo, colocaremos una vela en su interior y ya tendremos listo el portavelas.
¡Hasta el próximo DIY!